Si inviertes vas a terminar pagando impuestos tarde o temprano. Esta es una máxima de la fiscalidad de las inversiones, pero con sus matices.
Esos matices son los que pueden hacer que pagues 60.000 euros por los ahorros de tu vida o solo 10.000 euros. En este artículo te voy a explicar cómo funcionan los impuestos de tus inversiones, las claves para ahorrar y qué estrategias puedes seguir para optimizar tu carga fiscal (es decir, ahorrar impuestos legalmente).
☝️ Recuerda que no soy fiscalista. Los trucos para ahorrar impuestos al invertir que te cuento aquí son los que he aprendido después de años de inversión y de consultar a expertos.
Empezaremos con las dos claves básicas para ahorrar en impuestos, las que debes grabarte a fuego en la cabeza.
Después te explicaré cómo funcionan los impuestos de tus inversiones de manera clara y sencilla, porque saberlo te ayudará a planificarte mejor. Además, sin esos conocimientos, te costará más entender los 9 trucos de ahorro en la renta (IRPF) que te descubriré al final del artículo.
🤫 Las 2 claves para pagar menos impuestos
Puedes hacer muchas cosas para limitar los impuestos de tus inversiones, pero hay dos que están en la base de todo. Son las que cambiarán radicalmente el resultado de tu declaración de la renta.
☝️ #1: Planifícate
Es algo que suena igual de divertido que pegarte cabezazos contra la pared y, aun así, es lo que mejor funciona y lo que más quebraderos de cabeza te ahorrará.
¿En qué consiste planificar tus impuestos? En no dejar los impuestos para el momento de presentar el IRPF, porque entonces solo podrás limitarte a «hacer bien la renta», ni más ni menos.
🕰 La renta y los impuestos sobre tus inversiones se pagan de un año para otro. En 2022 has hecho la renta 2021. Es decir, has tributado por las ganancias e inversiones realizadas entre el 1 de enero de 2021 y el 31 de diciembre de 2021.
Cualquier movimiento que hagas más tarde, no cuenta para la renta 2021, sino para la de 2022.
La forma de ahorrar en impuestos al invertir es adelantarte al momento de hacer la renta y llevar a cabo durante el año las acciones necesarias para reducir tu carga fiscal durante el ejercicio en curso, no cuando te toca presentar el IRPF. Por ejemplo, si piensas vender parte de tus activos para compensar pérdidas y ganancias, hazlo dentro de este ejercicio fiscal. Si lo haces más tarde, ya no contará (contará en 2023, pero no en 2022).
✌️ #2: Retrasa todo lo que puedas el pago de impuestos
Cuanto más tarde pagues impuestos, mejor. Y no me estoy refiriendo a dividir en dos el pago del IRPF o a no pagar impuestos hasta que no vendas las acciones o fondos que tienes en cartera (una norma básica de la fiscalidad al invertir). Me refiero a no tributar por los beneficios que vayas sumando con tus inversiones, incluso si vendes o cambias la composición de tu cartera.
Esto es lo que se conoce como diferimiento fiscal y no todos los productos de inversión disfrutan de ella.
Como norma general, solo tributarás por tus inversiones al vender u obtener algún beneficio. Las ganancias que vayas acumulando hasta ese momento no hay que declararlas ni incluirlas en la renta. Cuando vendas y recuperes tu dinero es cuando pagarás impuestos, salvo que inviertas en productos con diferimiento fiscal.
Los tres productos que permiten retrasar el pago de impuestos en España son los 1) PIAS, 2) los planes de pensiones y PPAS y 3) los fondos de inversión, incluidos los fondos indexados. De todos ellos, los fondos indexados son para mí la mejor forma de invertir.
Con un fondo de inversión no hay que pagar impuestos cada vez que haces un traspaso. Es decir, puedes vender tu fondo y no tendrás que tributar en el IRPF siempre que reinviertas ese dinero en otro fondo (es lo que se llama un traspaso, cuando recuperas el dinero se habla de reembolso).
🔎 Si te interesa empezar, aquí te cuento cómo invertir en fondos indexados en España paso a paso.
A largo plazo esta es una ventaja incalculable, ya que con cada cambio que hagas en tu cartera te ahorrarás entre un 19% y un 26% en impuestos. Para que lo veas más claro, este es el rendimiento de una inversión de 10.000 euros con una rentabilidad del 8,5% anual con y sin diferimiento fiscal antes de impuestos:
Al cabo de 26 años tendrás 52.834 euros (antes de impuestos) en el primer caso y 76.867 euros (antes de impuestos) en el segundo porque habrás evitado tributar a Hacienda a lo largo del camino.
Por supuesto, al final tendrás que tributar por ese ahorro igualmente, pero aun así la ganancia será mayor. En concreto, después de cumplir con Hacienda dispondrás de 62.608 euros, casi 10.000 euros más.
👉 Esto es lo que consigues con el diferimiento fiscal. La bola de nieve se hace más grande. Y aunque tengas que pagar más impuestos, el resultado neto es mejor 😉
🔎 Cómo funcionan los impuestos de tus inversiones
Con lo que has aprendido hasta ahora ya vas por delante de la mayoría de personas en materia de impuestos, te lo aseguro.
Para ir un paso más allá necesitas comprender primero cómo funciona la fiscalidad de tu dinero. Así después te será más fácil entender cómo aplicar los trucos fiscales que te cuento en el siguiente apartado.
Esto es lo que te conviene conocer:
🔀 Se dividen en dos categorías
La mayoría de tus inversiones se incluyen dentro de la Base Imponible del Ahorro del IRPF (Impuesto sobre la Renta) y no en la Base General, donde sí tributa tu salario, actividades económicas y otras rentas.
Hacienda divide estas inversiones en dos categorías:
- Ganancias y pérdidas patrimoniales. Son las más habituales, las que todos entendemos por inversión. Se entiende que hay una pérdida o ganancia por la diferencia entre el precio de compra o venta de un activo o cualquier otro bien. Aquí entran las ganancias o pérdidas por la venta (sí, se tributa solo cuando vendes) de acciones, fondos de inversión, fondos indexados, ETFs e incluso la venta de un inmueble.
- Rendimientos de capital mobiliario. Son los dividendos que cobras, el rendimiento de las cuentas remuneradas, depósitos, bonos y renta fija en general y también las ganancias del crowdlending o el staking de criptomonedas. Los Unit Linked y PIAS también se incluyen aquí como el rendimiento de los seguros de vida. En resumen, el rendimiento que generan tus activos de inversión o tus bienes, a excepción de los inmuebles, que tienen su propia categoría (los rendimiento del capital IN-mobiliario)
📌 Los planes de pensiones son una de las excepciones a la norma general y tributan dentro de las rentas del ahorro en la base imponible general (la misma que tu salario).
Esta diferencia entre categorías es importante para calcular el rendimiento final de tus inversiones y dar con la base liquidable del ahorro, que es sobre la que pagarás impuestos. En el siguiente punto entenderás mejor por qué.
🔄 Se pueden compensar pérdidas y ganancias
Una vez has separado tus inversiones en categorías, llega la parte más importante de la fiscalidad del dinero: compensar pérdidas y ganancias.
Este concepto es muy sencillo y consiste en restar al dinero que has ganado las pérdidas que has sufrido. De esta forma solo pagarás impuestos por tus ganancias reales.
Este ejercicio se hace primero entre los activos o productos de inversión de cada categoría, después con la categoría entera y por último sumando las dos categorías que has visto.
¿Qué quiere decir esto? Que primero compensas pérdidas de acciones con acciones, fondos con fondos, ETF con ETFs y así con todos los productos de la categoría de pérdidas y ganancias patrimoniales. A continuación sumas y restas (compensas) el resultado de todos y así obtienes en beneficio o pérdida de la categoría. Por último, puedes compensar las pérdidas o ganancias patrimoniales con los rendimientos de capital mobiliario, para los que harás la misma operación (dividendos con dividendos, Unit Linked con Unit Linked, PIAS con PIAS… y después todos juntos.)
Eso sí, existen ciertos límites en caso de haber pérdidas. Y es que, no podrás compensar más del 25% de los rendimientos positivos entre categorías (ganancias y pérdidas y rendimientos de capital mobiliario).
Este sería el proceso paso a paso, para que lo entiendas mejor:
- Compensar dentro de las ganancias y pérdidas patrimoniales, entre sí. Empiezas con el rendimiento neto de las operaciones con acciones (restas pérdidas y ganancias de cada una), después, sumas el rendimiento neto en fondos que hayas reembolsado (o las pérdidas), de los ETFs, CFDs, criptomonedas… Y así con todas las inversiones de esta categoría.
- Compensar rendimientos de capital mobiliario, entre sí. Lo normal es que este apartado sea siempre positivo, pero puede ser negativo si tienes en cuenta los Unit Linked o PIAS o el crowdlending.
- Combinar ganancias y pérdidas patrimoniales con rendimientos de capital mobiliario y compensarlas entre sí en caso de que haya alguna que sea negativa. Recuerda que existe un límite del 25% para compensar entre categorías. Por ejemplo, el resultado de las ganancias y pérdidas es negativo (-1,000 euros), pero has ganado 500 euros en rendimientos de capital, podrás restar 125 euros (25% de 500) a esas pérdidas. Esta sería la operación: -1.000 + (500*0,25).
El resultado final es de -875 euros, que es la pérdida total a efectos fiscales. - Dar con la base liquidable del ahorro. El resultado esta operación es la base liquidable del ahorro, sobre la que después pagarás impuestos.
- Calcular la tarifa fiscal. El último paso es aplicar sobre esta cifra los tipos del ahorro (el % a pagar de impuesto), que se dividen en cuatro tramos que funcionan de forma progresiva.
Tramos del ahorro en la renta | Tipo a aplicar |
---|---|
Ganancias hasta 6.000 € | 19% |
Entre 6.000 € y 50.000 € | 21% |
Entre 50.000 € y 200.000 € | 23% |
Entre 200.000 € y 300.000 € | 26% |
Más de 300.000 € | 27% |
Como ya te he comentado, estos cuatro tramos se aplican de manera progresiva. Si tu base liquidable es de 10.000 euros, no pagarás un 21% o 2.100 euros al hacer la renta.
Sino que tributarás: a un 19% por los primeros 6.000 euros, lo que equivale a 1.140 euros, y después un 21% sobre los 4.000 restantes, lo que supone 840 euros. Al final pagarás 1.980 euros (y no 2.100 euros).
🧮 Imagina que esta es tu cartera de inversiones al final del año.
- Has perdido 1.000 euros en acciones (pérdida patrimonial)
- Has ganado 2.500 euros en fondos (ganancia patrimonial).
- Has ganado 600 euros con bonos del Estado, dividendos de acciones e intereses de cuentas corrientes (rendimiento de capital mobiliario).
Empezarás compensando las ganancias y perdidas patrimoniales ➡️+2.500 – 1000 = +1.500 €
Después sumarás los rendimientos de capital ➡️+1.500 + 600 = 2.100 €
El resultado lo pasarás por las tablas del ahorro (19%) ➡️ 2.100 * 0,19 = 399 €
Esa es la cifra que deberás pagar en el IRPF por tus inversiones
¿Qué pasa si has perdido dinero? Imagina que has tenido un mal año y el resultado final de tus inversiones es negativo, incluso después de compensar pérdidas y ganancias.
En ese caso, Hacienda te permite llevar esas pérdidas hasta los 4 años siguientes. En otras palabras, podrás usar ese dinero que has perdido para compensar las ganancias de los cuatro siguientes ejercicios.
Este cuadro de Hacienda resume el proceso.
🧮 Calcular si hay ganancia o pérdida, la clave
Ya sabes cómo se integran tus inversiones en la declaración de la renta. Lo que no te he contado es cómo saber si has tenido una ganancia o pérdida patrimonial y, sobre todo, cómo calcular la cuantía.
Los rendimientos de capital son fáciles.
Sin embargo, las ganancias patrimoniales son más complejas. Para ponértelo fácil, te cuento las tres cosas que debes saber para calcular las ganancias patrimoniales son:
1️⃣ Se calcula por la diferencia entre el precio de compra y de venta
Para saber si has ganado o perdido dinero con una inversión solo tienes que enfrentar el precio de venta al precio de compra. La ganancia vendrá dada por la diferencia entre el precio que pagaste y el precio al que vendes.
Supongamos que compras 10 participaciones de un fondo de inversión a 100 euros cada una. Inviertes un total de 1.000 euros. Cuando decides reembolsar el dinero el precio de las participaciones es de 15 euros y recibes 1.500 euros en total. Tu ganancia patrimonial será de 500 euros.
Así es como se calcula de forma básica cuál es tu ganancia o pérdida al invertir.
¿Qué pasa si has invertido de forma periódica? Al hacerlo habrás comprado a diferentes precios. También puede ocurrir que solo quieras vender un porcentaje de tus participaciones. ¿Cómo se calcula? En ese caso…
2️⃣ Se utiliza el método FIFO
Lo primero que entra es lo primero que sale. En eso consiste la norma First In, First Out o FIFO.
Aplicado a tus inversiones, quiere decir que al vender participaciones, primero venderás siempre las primeras que compraste. Así de fácil. El precio al que compraste esas participaciones es el que se tendrá en cuenta para calcular tu ganancia o pérdida patrimonial.
🧮 Vamos a ver cómo funciona la norma FIFO con un ejemplo. Imagina que inviertes de forma periódica en un fondo y realizas las siguientes compras:
- Compra 1 ➡️ 500 € = 5 participaciones a 100 euros cada una
- Compra 2 ➡️ 450 € = 5 participaciones a 90 euros cada una
- Compra 3 ➡️ 400 € = 5 participaciones a 80 euros cada una
- Compra 4 ➡️ 600 € = 5 participaciones a 120 euros cada una.
Pasado el tiempo las participaciones cotizan a 120 euros y quieres vender una parte ¿Cómo sería la venta?
- Si vendes 5 participaciones, se venderás las primeras, que compraste a 100 euros. Tus ganancias serían de 20 euros por participación o 100 euros.
- Si vendes 10 participaciones, serán las de la compra 1 y 2, con lo que tu ganancia será de 20 euros para las primeras y de 300 para las segundas. En total, habrás ganado 300 euros.
- Si vendes 15 participaciones, el beneficio serán los 300€ anteriores más 40€ * las siguientes 5 participaciones. Es decir, 500€ en total.
¿Y si en lugar de vender traspasas las participaciones a otro fondo de inversión? El mecanismo sería el mismo. Primero traspasarás las más antiguas. La ventaja es que, como se trata de un fondo, no pagarás impuestos (el traspaso de fondos no tributa).
3️⃣ Hay límites temporales para poder compensar la inversión
Por último, hay una normativa que se conoce como la norma anti-aplicación o norma de los dos meses.
La norma está regulada por el artículo 33.5 de la Ley de IRPF y establece que no podrás compensar las pérdidas si:
- Has comprado ese mismo activo dos meses antes de su venta.
- Compras el mismo activo en un plazo de dos meses desde que lo vendiste.
Esta norma de los dos meses o norma anti-aplicación se creó para que no puedas vender un fondo para aflorar pérdidas que compensen tus ganancias y recomprarlo después porque te interesa tenerlo en cartera.
Este plazo de dos meses se eleva a 1 año entero para los valores o participaciones no admitidos a negociación en alguno de los mercados secundarios oficiales de valores definidos en la Directiva 2004/39/CE.
Si incumples con esta norma no podrás usar esas pérdidas para compensar ganancias, aunque sí podrás computarlas cuando vendas todas las participaciones del fondo (si es que conservabas alguna en la cartera).
🧰Trucos para optimizar los impuestos por tus inversiones
Hasta aquí la parte más teórica, con la que puede que se te hayan ocurrido formas de pagar menos impuestos por tus inversiones.
Por si acaso, te voy a descubrir 9 estrategias para optimizar tus impuestos. Todas son estrategias legales, ya que lo que nunca debes hacer es evadir impuestos.
1️⃣ Aflorar pérdidas o ganancias para compensar
Compensar pérdidas y ganancias es quizás la herramienta más potente para reducir tu factura fiscal.
Si te planificas de forma adecuada evitarás pagar impuestos por tus ganancias. Solo tienes que lograr que las pérdidas de algunos de tus activos compensen las ganancias de otros y viceversa.
Esta estrategia se puede usar en dos sentidos:
- Cuando vendes un activo en pérdidas, después puedes hacer aflorar ganancias para compensar esas pérdidas. Es decir, vender otro activo que sí está en positivo (aunque no tuvieras intención de venderlo) para no pagar impuestos por esas ganancias. Esto sería hacer aflorar ganancias.
- Cuando vendes un activo con ganancias, y entonces decides vender otro activo con pérdidas. Es decir, haces aflorar pérdidas para compensar parte de (o todas) las ganancias.
🧮 Imagina que tienes dos fondos en cartera con el siguiente resultado.
- Fondo 1 con 10.000 euros invertidos. Acumula una pérdida del 7% que equivale a 700 euros.
- Fondo 2 con 7.000 euros invertidos. Suma una ganancia del 20% que equivale a 1.400 euros.
Con este escenario puedes aflorar pérdidas para compensar las ganancias. En otras palabras, puedes vender el fondo 1 y asumir esas pérdidas y, al mismo tiempo, hacer lo propio con un porcentaje de tu inversión en el fondo 2.
Para cuadrar las cuentas tendrías que retirar todo tu dinero del fondo 1 que equivale a 700 euros y la mitad del fondo 2, que equivaldría a ese capital.
Así, al hacer la renta no tendrías que pagar impuestos por esa plusvalía que acumulas.
La estrategia de aflorar pérdidas y ganancias es muy útil para optimizar tu factura fiscal, aunque para llevarla a cabo debes tener en cuenta la norma anti-aplicación de los dos meses.
💡 Con los fondos indexados puedes saltarte la norma sin incumplir la ley. La razón es que la norma impide recomprar el mismo activo en dos meses, pero no invertir en uno similar.
Es decir, si inviertes en fondos indexados puedes deshacer posiciones en el Amundi Index MSCI World y comprar el iShares Core MSCI World, que replica exactamente el mismo índice. El activo que estás comprando es diferente y, por lo tanto, la norma anti-aplicación no influirá.
Generar plusvalías y minusvalías sin retirar el dinero con Indexa Capital
Como ya sabrás si me sigues, tengo mi cartera indexada con Indexa Capital. Una de las razones para hacerlo son sus servicios adicionales, que incluyen la optimización fiscal de las inversiones.
Una de sus últimas incorporaciones es un nuevo servicio que permite generar plusvalías o minusvalías sin tener que retirar el dinero, con la que solo tienes que decir el importe de ganancia o pérdida a generar. A partir de ahí, el gestor se encargará de vender las participaciones y comprarlas más tarde. Fácil y sencillo, como me gusta. Si quieres saber más, aquí lo explican mejor.
Y si quieres saber por qué invierto con este roboadvisor, en esta entrada analizo a fondo Indexa Capital, opinión incluida.
2️⃣ Invertir en un plan de pensiones si…
Los planes de pensiones son un clásico de la planificación fiscal, ya que las aportaciones que hagas reducirán la base imponible general (sí, la de tu sueldo).
El dinero que inviertas en el plan servirá para pagar menos impuestos. Será como si se restase al dinero que has ganado. Por ejemplo, si ingresas con tu salario 40.000 euros e inviertes el máximo de 1.500 euros en un plan individual, tus ingresos para la renta serán de 38.500 euros.
A diferencia del resto de productos de inversión, los planes de pensiones tributan dentro de la base general del IRPF al rescatarlo, que es la siguiente:
Tramos de IRPF | Tipo a aplicar |
---|---|
De 12.450 € a 20.200 € | 24% |
De 20.200 € a 35.200 € | 30% |
De 35.200 € a 60.000 € | 37% |
De 60.000 € a 300.000 € | 45% |
Más de 300.000 € | 47% |
La regla de oro para saber si conviene invertir en un plan de pensiones es sencilla. Invierte si crees que tus ingresos al jubilarte serán menores que los que percibes ahora, al invertir en el plan de pensiones. Si quieres profundizar, escribí sobre ello detalladamente en este artículo: Cómo saber si compensa un plan de pensiones por las deducciones.
🙋♂️Por si te sirve de ayuda, yo SÍ TENGO un plan, aunque está indexado. En este artículo sobre planes de pensiones indexados te cuento cuál es.
3️⃣ Invertir en varios fondos para aprovechar la norma FIFO
Una técnica óptima si inviertes en fondos indexados y que rompe la progresividad que marca la norma FIFO.
Su premisa es muy sencilla. El método FIFO hace que siempre vendas primero las participaciones más antiguas, que normalmente serán las que más rentabilidad acumulan y por las que más impuestos pagarás.
¿La solución? Dejar de aportar a ese fondo después de un tiempo (3 años, por ejemplo) y empezar a invertir en otro similar. Con los fondos indexados no tendrás problema en encontrar uno que cubra el mismo índice, pero con otra gestora, como ya te expliqué con el Amundi Index MSCI World y el iShares Core MSCI World.
4️⃣ Sistema del doble fondo monetario para vender tus fondos
La estrategia del doble fondo monetario viene de un hilo de Rankia y sirve para optimizar fiscalmente la venta de tus fondos y saltarte, otra vez, la regla FIFO.
El objetivo de este sistema es que al vender un fondo pagues por las participaciones más nuevas y no por las más viejas, que sumarán una ganancia mayor y también supondrán pagar más impuestos.
En esencia, lo que haces es:
- Traspasar las participaciones más antiguas que NO quieres vender a un fondo monetario 1.
- Traspasar el resto de participaciones, las que sí quieres vender, a otro fondo monetario 2.
- Vender las participaciones más nuevas del fondo 2.
- Devolver (traspasar) las participaciones más antiguas al fondo principal.
Al final lo que haces es retirar las participaciones más nuevas del fondo para quedarte con las más viejas.
⚠️ El sistema en sí es algo complejo y, como explican desde la Hormiga Capitalista y Rankia, podría considerarse evasión fiscal o fraude de ley precisamente por esa complejidad, aunque técnicamente es totalmente legal.
Además, tampoco debes perder de vista que el dinero estará un tiempo parado entre traspaso de fondos.
Si quieres hacer algo parecido, puedes optar por el truco anterior. En otras palabras, traspasar una parte del dinero de tu fondo a otro similar y recuperar el resto. Así también optimizas el reembolso sin tanto jaleo.
5️⃣ Hay inversiones que desgravan, como las start ups
La inversión en start ups permite desgravar en la renta hasta un 30% de las cantidades que inviertas sobre un máximo de 60.000 euros. A efectos prácticos, podrás deducir hasta 18.000 euros.
📌 Cuando entre en vigor la nueva ley de Start Ups, la base imponible se elevará hasta los 100.00 euros y el porcentaje a deducir al 50%.
Esta deducción se pensó para business angels, pero cualquier persona se puede beneficiar de ella. Eso sí, tanto la empresa en la que inviertas como la inversión tendrá que cumplir ciertos requisitos.
Los más importantes son:
- Que la empresa tenga menos de 3 años de vida y que no cotice en bolsa.
- Que mantengas la inversión durante al menos tres años y nunca más de 12 años.
Desde un punto de vista fiscal es una inversión inmejorable, pero no debes olvidar en lo que estás invirtiendo de verdad.
Una start up es una empresa de nueva creación, que puede tener potencial de crecimiento, pero también un riesgo enorme de desaparición o de ser solo un negocio sostenible que no consigas rentabilizar. Además, son inversiones muy poco líquidas en las que puedes verte fácilmente atrapado.
⚠️ En otras palabras, no es una inversión para todo el mundo.
6️⃣ Revisa tus rendimientos netos antes de vender inversiones
Si tus ingresos entre inversiones y alquileres superan los 6.500 euros, no podrás aplicar la reducción de 5.565 euros por rendimientos del trabajo de la que pueden beneficiarse las personas con ingresos por debajo de 16.825 euros.
Si ganas menos de esa cantidad, haz cálculos antes de deshacer posiciones y vender.
7️⃣ Invierte en tu hipoteca si es anterior a 2013
La deducción por adquisición de vivienda habitual sigue vigente para las casas que se compraron antes de 2013.
Gracias a ella podrás deducir un 15% de la hipoteca y los seguros vinculados sobre una base máxima de 9.040 euros. Si has pagado (en cada año) menos de esa cantidad de hipoteca, puedes adelantar parte del préstamo hasta llegar a esa cifra para maximizar tus beneficios fiscales.
Si estás casado y la hipoteca está a nombre ambos, podéis doblar la deducción si hacéis la declaración individual, ya que los límites que has visto se aplicarán a cada parte de la pareja. Mientras, en la declaración conjunta sólo podréis deducir sobre los 9.040 euros que has visto. Es decir, que aquí no se dobla la base de la deducción.
8️⃣ Si tienes casa, puedes desgravar las obras
En 2022 y 2023 vas a poder desgravar las obras de mejora de eficiencia energética que hagas en el hogar. Se trata de deducciones cuantiosas y que puedes ver en este enlace.
Además, si vendes tu casa, recuerda que para calcular la ganancia patrimonial también podrás sumar al precio de compra las obras de mejora que hayas realizado, así como los impuestos que pagaste en su momento por la compra.
9️⃣ Aprovecha el salario en especie
Por último, un consejo que no tiene que ver con inversiones, pero sí con ahorrar en la renta. A la hora de negociar tu sueldo, no te olvides del salario en especie.
Este salario en especie son cosas como una vivienda que te pague la empresa, cheques guardería, vales de comida, acciones de la empresa o los seguros a tu nombre que paga la empresa.
Esta retribución en especie tiene una gran ventaja fiscal: está exenta de tributar siempre que no supere el 30% de tu salario, aunque también hay límites según el tipo de beneficio.
⁉️Preguntas frecuentes
¿Es obligatorio hacer la renta si inviertes?
No, en absoluto, pero sí que es más fácil que estés obligado a declarar. Invertir afecta a los límites para tener que hacer la renta.
Lo más habitual es fijarse en el salario para saber si estás obligado a presentar el IRPF. Si ganas menos de 22.000 euros con un solo trabajo o menos de 14.000 euros con dos o más pagadores y has cobrado más de 1.500 del segundo y siguientes (si tienes dos trabajos, has estado en paro o te cambias de empleo), no tendrás que hacer la renta.
Invertir altera estos mínimos. Si inviertes puedes estar obligado a declarar aunque no tengas un salario de esas cantidades siempre que:
- Ganes más de 1.600 euros con tus inversiones en el total del ejercicio.
- Pierdas más de 500 euros con tus inversiones.
- Ganes más de 1.000 euros entre tus inversiones y rendimientos de trabajo.
¿Tengo que pagar impuestos si no vendo mis inversiones?
No. Al invertir solo pagas impuestos cuando ganas dinero. Esto puede ser porque vendes tus activos, en cuyo caso es una ganancia o pérdida patrimonial, o porque te generan un ingreso, como por ejemplo los dividendos de una acción o un depósito. En ese caso estaríamos ante un rendimiento de capital mobiliario.
¿Hay un límite de dinero en bolsa para tener que hacer la renta?
Tener dinero invertido en bolsa o en cualquier otro producto no hace que tengas que presentar la renta.
Solo tributas cuando vendes tus acciones y ganas dinero y solo estás obligado a presentar la renta si esas ganancias superan ciertos límites.
Lo que no existe es un límite exento de tributar. Una vez estés obligado a hacer la renta, deberás incluir todas tus ganancias y pérdidas, por pequeñas que sean.
16 comentarios, léelos, suele haber miga ;)
Buenos días Carlos,
muchas gracias, como siempre, por toda la información.
Mi pregunta es, quizás un poco simple, sin embargo…
¿Se pueden compensar pérdidas de la Base Imponible del ahorro en lo ganado en la Base General?
Más concretamente. ¿Se puede compensar las ganancias del salario con las pérdidas de compra de fondos de este año? Habría que vender parte de esos fondos que han perdido valor, aunque se hayan comprado hace dos o tres años. ¿Verdad?
Gracias de nuevo,
un saludo,
Buenas Rafa,
Estaría bien esa compensación, pero no es posible 😉
El salario no se puede compensar con nada… Bueno, aportando a un plan de pensiones. Pero no con pérdidas.
Un abrazo!
Buenas tardes, me gustaría saber cuando abres de nuevo el curso y si se puede pagar a plazos.
Gracias
Buenas Maria Luisa,
En octubre abro el curso gratuito y a continuación el avanzado.
Puedes apuntarte a la lista de espera aquí: https://vip.libertadinmobiliaria.es/registro
Sí, se puede pagar a plazos! En el curso gratuito inicial cuento todos los detalles 🙂
Un abrazo!
Gracias por tu artículo Carlos. Claro, sencillo y totalmente didáctico
Muchísimas gracias Raúl 🙂
Eso intento!
Un abrazo!
Hola Carlos!! Para compensar ganancias y perdidas en acciones por ejemplo no habría que distinguir entre ganancias y perdidas de mas de 1 año y de menos de 1 año? O eso ya no existe?
Buenas Txema,
Creo que esto era antes!
Un abrazo!
Hola Carlos! Muchísima gracias por un articulo que aporta tan valor! fenomenal!
Quería saber si hay alguna forma sencilla de hacer una simulación de la renta del año que viene para ver si merece la pena hacer algún cambio o no.
Muchas gracias
Muy buena pregunta Serena,
Puedes hacer simulaciones directamente en el programa de renta de la aeat.
Aunque quizá sea con el del año anterior. Poco cambiará en principio.
Un abrazo!
Hola Carlos.
Muchas gracias por el artículo. Muy bueno y muy bien sintetizado. Por aportar algo creo que también habría que tener en cuenta el impuesto de patrimonio en la planificación. Y que la suma de ambos Patrimonio + IRPF no puede sumar más del 60% de tus ingresos anuales. Esto es importante fundamentalmente por invertir en acciones o fondos que capitalicen y no distribuyan dividendos. O que la ganancia se establezca por ganancia patrimonial. La diferencia cuando la bola de nieve crece es muy grande. Y más en comunidades en las que este impuesto no está bonificado.
Muy bueno Luis!
Muchas gracias por apuntarlo y así lo tenemos en los comentarios para todo el que quiera leerlo 😉
Un abrazo!
Buenas Carlos, muchas gracias por escribir estas entradas, estás ayudando a mucha gente que, como yo, no entendemos muy bien como funciona todo esto.
A mi me ha surgido una duda: si yo vendo un inmueble y utilizo el dinero que he ganado para invertir en un fondo indexado, ¿tendría que declarar en la renta ese dinero? o como lo he invertido en un fondo puedo hacerme el despistado y no contabilizarlo como ganancia?.
Muchas gracias
Buenas David!
Gracias a ti por leer 😉
Lamentablemente son dos cosas distintas. Por la ganancia del inmueble te toca pagar. Y luego con lo que quede, invertir en el fondo indexado.
Un abrazo!
Buenos días Carlos , cuando tengas un hueco me miras lo del personal shopper de Ciudad Real .No he realizado tu curso porque no tengo tiempo para nada , de hay que necesito un personal shopper para que me ayude a invertir bien. Gracias
Buenas Miguel Ángel,
Estoy en ello sí! En breve espero poder daros contactos, aunque no sé si tendré en todas las provincias!
Un abrazo!